Es una máquina completamente automática. Pulsar un botón y el ciclo está programado automáticamente (6 segundos). Desde que pulsas el botón durante 6 segundos congela la copa al instante, y en la parte trasera cara al consumidor se enciende una placa de color azul con la palabra QUICK FROST el anagrama del hielo y -40. A los 6 segundos la máquina deja de congelar y las luces se apagan automáticamente.
Actualmente, es la máquina más vendida del mundo. Destaca lo reducido de sus medidas (14 cm de ancho X 220 cm de fondo X 32 cm de alto), la calidad de sus materiales, la manejabilidad y su precio.